Luego de dos años de contracción económica, América Latina y el Caribe ha comenzado a recuperar el pulso gracias básicamente al consumo privado.
Tras la contracción de un punto y medio en el 2016, el año pasado la región creció un 0,9%, un dato positivo pero aún lejano del crecimiento mundial que fue de tres puntos, según el informe Perspectivas Económicas Mundiales del Banco Mundial.
Para este año se espera que el crecimiento de la región se duplique y que para el 2019 alcance el 2,6%, más en sintonía con la media global.
Dicho estudio refiere que el país que más creció fue Panamá con una expansión del 5,5% de su PIB, seguido de Nicaragua, Republica Dominicana, Honduras, Bolivia y Costa Rica.
Por otro lado, la incertidumbre política, si bien afectó negativamente a países como Chile y Perú, no influyó demasiado en Brasil, que venía de una crisis política más profunda.
El año pasado significó el regreso de la economía regional a la senda del crecimiento. Sin embargo, se espera según las previsiones del Banco Mundial, que el crecimiento económico de América Latina se duplique este año hasta alcanzar el 2% del PIB y continúe en esa línea en los próximos dos años.
Estos pronósticos optimistas se deberían al fortalecimiento del consumo, a un crecimiento de la inversión privada, y a la mejora de las condiciones de las exportaciones, especialmente en los países productores de commodities.
14-02-2018 / GS1 Perú