- Los ataques hutíes en el mar Rojo avivan otro "shock" de inflación: Por ejemplo llevar un contenedor de China a España pasa de 1.500 a 7.000 dólares.
Los ataques de los rebeldes hutíes en el mar Rojo no han provocado aún grandes rupturas en la cadena de suministro. Sin embargo, tanto desde el sector logístico como desde el empresarial son conscientes de que, si la crisis se prolonga, las interrupciones pueden acabar llegando. Y durante un tiempo. El último en advertirlo ha sido una voz tan autorizada como la de Vincent Clerc, consejero delegado de A.P. Moller-Maersk, la segunda mayor compañía de transporte marítimo de contenedores del mundo.
Durante su participación en una mesa redonda en el Foro Económico Mundial que se celebra en Davos, Clerc ha advertido de que "para nosotros, esto (los ataques) significará tiempos de tránsito más largos -ahora se están desviando por el Cabo de Buena Esperanza, al sur de África, los barcos que antes iban por el Canal de Suez- y probablemente interrupciones en la cadena de suministro durante al menos unos meses", afirmó.
En otro panel en el mismo foro, el consejero delegado del gigante alemán de la logística DHL, Tobias Meyer, ha avisado también de que si los buques de transporte deben ampliar sus rutas entre un 30% y un 40% para evitar transitar por el mar Rojo esto puede conducir "a una escasez de contenedores" en unas semanas porque ese reflujo no se está produciendo actualmente al ritmo que la gente estaba planeando. Meyes, no obstante, ha considerado que la situación en el mar Rojo se encuentra por el momento contenida y ha subrayado que en la actualidad la demanda global "sigue siendo bastante débil". "Hay mucha capacidad de envío que entró en el mercado. Entonces, el trasfondo es muy diferente al que tuvimos hace dos o tres años", añadió en referencia a los cuellos de botella registrados por la crisis del "Evergiven" hace unos años, cuando se bloqueó el tránsito a través del Canal de Suez.
Problemas al alza
Aunque los expertos en España aseguran que, en este momento, los problemas de suministro no son importantes, hay sectores como el del gran consumo en los que empieza a cundir la preocupación. AECOC, la asociación de fabricantes y distribuidores de España, aseguró que las empresas están empezando a encontrar dificultades para el suministro de determinadas materias primas, e incluso de producto acabado como textil y muebles. Por ello, las empresas que forman parte de la cadena de valor del gran consumo están tomando medidas preventivas, anticipando sus compras de ciertos productos para evitar posibles disrupciones de la cadena de suministro en futuros escenarios de consumo.
AECOC también advirtió el otro gran riesgo que puede traer la inestabilidad en la zona: la inflación. "La actual coyuntura está teniendo un impacto significativo para las principales empresas dedicadas a la fabricación y distribución de sectores de consumo claves para la economía nacional como los de alimentación, textil y moda, ferretería y bricolaje, bienes tecnológicos de consumo, entre otros", aseguró AECOC. Estos sectores, advirtió, están empezando a sentir preocupación por el aumento de costos que están sufriendo y que, de persistir en el tiempo, "podrían llegar a repercutir directamente en el precio final del producto, algo que el sector desea evitar para no alimentar el actual contexto inflacionista".
La Federación de Industrias de Alimentación y Bebidas (FIAB) también ha asegurado hoy mismo que existe "preocupación" por parte de la industria alimentaria por lo que está ocurriendo en el mar Rojo, ya que es un canal de salida y entrada para las empresas del sector. "Va a generar tensión y ya lo está haciendo. La cadena de valor sigue tensionada y las industria trabajamos para rebajar el impacto, pero los costos siguen elevándose. Seguiremos teniendo tensión en la cadena que en parte ya afecta a los precios", ha declarado su presidente, Ignacio Silva.
En el mundo, compañías automovilísticas como Volvo y Tesla han anunciado interrupciones parciales de producción en sus plantas de Gante (Bélgica) y Alemania debido al retraso en la llegada de componentes por la inestabilidad en el mar Rojo. En España, compañías como Michelin también han tenido problemas para mantener su ritmo de producción por falta de caucho.
17-01-2024 / GS1 Perú