El profesor Jan Fransoo ha investigado a profundidad los canales tradicionales y lo que él denomina ‘nanostores’: pequeñas tiendas, casi siempre familiares, que surten a las distintas clases sociales con productos, es decir, las famosas tiendas de la esquina. Son tradicionales pero, como lo revela en esta entrevista con GS1 Perú, tienen un potencial innovador interesante, pues puede llegar a más consumidores modernizando su logística y cadena de suministro.
¿Cuáles son sus perspectivas de este canal y qué aportes tiene para mercados como el peruano en este aspecto? Estas y otras preguntas son respondidas en la siguiente entrevista y serán ampliamente comentadas en la conferencia que dará en la XXIV Expogestión, organizada por GS1 Perú y que se realizará el 20 y 21 de agosto. Puede tener más información sobre este importante evento e inscribirse aquí.
Jan C. Fransoo es profesor de gestión de operaciones y logística en Kuehne Logistics University, donde también se desempeña como Decano de Investigación y miembro de la Junta Ejecutiva.
¿Cuáles son las características de las nanostores?
Se trata de pequeñas tiendas, usualmente de propiedad de familias, con muchos consumidores ubicados, principalmente, en los niveles más básicos de la pirámide económica. Le interesa a productores, como por ejemplo Coca Cola, Unilever o Nestlé, en términos de marcas, o a peruanos como Inca Cola. Estos locales son muy importantes para ellos pues a través suyo llegan a sus consumidores. Es un canal antiguo, con características particulares, pero lo que vemos ahora como tendencia en India y algunas naciones de África, por ejemplo, es la irrupción de la tecnología en la cadena de suministro.
¿Podría darnos algún ejemplo?
En China, la compañía jd.com, una de las dos ‘Amazon’ del gigante asiático, está usando las ‘nanostores’ como espacios para recoger las compras online. Pero también sirven para que aquellas personas que no tienen acceso a tarjetas de crédito puedan conseguir productos de jd.com en este canal y comprar usando efectivo.
¿Se está haciendo una labor similar en Latinoamérica y Perú?
En Sudamérica hay bastantes startups. En Perú, por ejemplo, está Rappi, que ofrece servicios de plataforma. Otra compañía activa es Tienda pago, una startup mexicana que canaliza el pago en el canal tradicional. En concreto, Tienda pago se encarga de pagar los productos que una tienda pequeña no puede asumir por un tiempo determinado, generando una suerte de microcrédito con la ‘nanostore’. En este canal hay muchas tecnologías emergiendo que pueden llevarlo al siguiente nivel.
¿Para las grandes tiendas es difícil competir con el canal tradicional en Latinoamérica?
Lo que vemos es que las tiendas grandes están bajo presión, particularmente en las ciudades grandes, sobre todo por el tráfico, que conlleva un alto costo por el transporte. En muchos países de América Latina hay muchas tiendas de conveniencia que van creciendo, las cuales llevan a las grandes marcas de las grandes tiendas a enfocarse en estos pequeños canales. Las ‘nanostores’ han ido creciendo porque tienen como atributos la proximidad, la conveniencia, aunque quizá por el precio y el costo del negocio solo sean accesibles para la clase media.
¿Cuáles son las dificultades para el canal tradicional en términos de logística?
El reto más grande desde esta perspectiva es que hay mucha fragmentación: las tiendas son muy pequeñas y hay que hacer muchas paradas para terminar una ruta desde el punto de vista del transporte y así lograr una ganancia. Entonces, hay muchas rutas pero pocos productos entregados. Otros retos son la falta de estacionamientos, demora en las transacciones con el dueño de la ‘nanostore’, de recoger el dinero y dejar el producto. Son problemas constantes.
¿Cuáles son las soluciones que plantea?
Una de ellas es encontrar maneras para reducir el tiempo de transacción en la tienda. Por ejemplo, se puede quitar la demora en la transacción de dinero. Hemos visto que con ello se elimina un 30% de la demora. Otro factor, que ayudaría también otro tercio del tiempo, es el momento de estacionar. Si mejoramos esto último puede beneficiarse inclusive la ciudad, pues habrá menos tráfico. Finalmente, hay que hacer más eficaces las órdenes, pues eso implicará que visitemos menos las tiendas y esto se puede lograr con microcréditos.
¿Cómo ve el mercado peruano de ‘nanostores’?
Es un canal muy importante y muy interesante para muchas compañías. El canal de comidas y bebidas es el más importante, según lo que hemos investigado. Con este panorama, creo que en el futuro se buscarán muchas innovaciones y tecnología que el mercado crezca.
30-07-2019 / GS1 Perú