El fin de un logístico, entre otras cosas, es brindar el mejor servicio a sus clientes internos y externos, flexibilidad y velocidad para adecuarse a los requerimientos y necesidades de estos, máxima eficiencia en la cadena de suministro, entre otros. Hoy hablaremos de la última en particular y sobre todo enfocada en los almacenes y Centros de Distribución (en adelante almacenes o CDs).
Se ven muchas operaciones logísticas que buscan eficiencias a través de diversas herramientas, como: i) la mejora de procesos, ii) aplicación de herramientas lean, iii) revisión y análisis de flujos, iv) análisis de tiempos y movimientos, entre otras. Sin embargo, una no tan conocida, pero crítica en un almacén, es el slotting.
Slotting, viene de la palabra “slot”, que es la posición o nicho donde se guarda la mercadería. El slotting es una “ciencia” logística importante y estratégica, que busca encontrar la mejor posición o slot, dentro de todo el almacén, para guardar un producto o mercadería, buscando la optimización de espacios, la mayor eficiencia y el menor movimiento, recorrido o traslado dentro del CD.
¿Qué hacer para implementar el slotting en un almacén? En resumen, se sugieren realizar los siguientes pasos para implementar el slotting en un almacén:
- Definir cuál es la distribución de la mercadería dentro del CD, indicando claramente qué tipo de productos; dependiendo de la división, línea o jerarquía, irán a qué tipo de almacenaje, ejemplo: piso, rack selectivo, pasillo ancho o pasillo angosto, trilateral, estantería, multinivel, rack drive-in, rack push back, etc. Normalmente un tipo de producto va a un tipo de almacenamiento y algunos a más de uno.
- Identificar cual es la composición de los productos o SKUs, clasificándolos de mayor a menor rotación (3 o 4 categorías). En caso no se sepa de parte del área comercial cómo será la rotación, se puede tomar como referencia la profundidad. Lo ideal es tener el dato de qué rotación tendrá la mercadería, pero son pocas las empresas donde el área comercial indica que rotación tendrá x, o z mercadería. Un ejemplo extremo, es aquel producto que se compró en una empresa con gran profundidad y por ende fue calificado como A, sin embargo, después de hacer un análisis de movimientos a los 2 meses de almacenado, se detectó que su rotación era baja. Preguntándole a Comercial, se concluyó que se había realizado una compra con un precio tan bajo, que valía la pena sobre stockearse para un año. En otro extremo, en otro ejemplo se compró un producto con pocas unidades y fue calificado como C, enviándose al fondo de los pasillos, en las posiciones más altas; sin embargo, el producto en su totalidad salió en una semana. Los ejemplos citados son excepciones extremas para graficar lo dispares que pueden ser las rotaciones de los productos. Lo que se sugiere, en caso la parte comercial desconozca cómo será la rotación, trabajar con la profundidad y en algunos casos existirán algunas excepciones, las cuales serán mínimas y tendrán que ser corregidas en el tiempo.
- Una vez definidas y clasificadas la mercadería por rotación, por ejemplo: A, B y C, siendo A los de mayor y C los de menor rotación; deberá definirse cuántos slots dentro de la zona de este tipo de productos deben ser reservadas para cada tipo de rotación (si puede ser manejada con el WMS, sería mejor).
- Definir luego, cuántas unidades o m3 tendrán los productos A, B y C, puede ser una sola regla, o diferentes rangos para cada familia de productos.
- Posteriormente, debe definirse una política por escrito respecto a todo lo anterior, la cual debe ser desplegada al personal del almacén y debe ser cumplida desde las puertas de recepción y controladas por un área de control de gestión o de otro nombre, a través de reportes sistémicos.
22-08-2019 / GS1 Perú