¿Cadena de suministro resiliente?, ¿qué significa esto?
Antes de entender este concepto hablemos un poco de la resiliencia. La resilencia es la capacidad de adaptación de un sistema a un agente perturbador. Si llevamos el concepto al mundo empresarial, podemos entender que una compañía resiliente será aquella que ha aprendido a gestionar el riesgo, es flexible y sabe a adaptarse a un mercado cambiante, dinámico y retador.
Mas allá de la situación actual por la pandemia del COVID 19, seguramente, han sido muy pocas las organizaciones que han estado preparadas para un fenómeno de la magnitud del actual; sin embargo, ¿están nuestras organizaciones preparadas para eventos menores?, ¿hemos diseñado planes “B” para el suministro, proveedores alternativos, por lo menos para nuestras principales categorías?, ¿medimos la posibilidad de la interrupción de nuestra cadena de suministro?, ¿nuestros contratos de suministro están preparados?, ¿tenemos un plan de acción para momentos de escasez?, ¿nuestras áreas de finanzas estas preparadas para tomar fuentes externas de financiamiento?, etc.
Cadena de suministro resiliente: será aquella que se encuentra preparada y sabe cómo reaccionar ante eventos disruptivos.
No vamos a revisar todas las respuestas posibles a las preguntas formuladas, sin embargo, será muy importante para tu organización que lo realices, fundamental que lo respondas y aun mejor que desarrolles planes. Tu compañía y tu carrera profesional si duda lo apreciarán.
El financiero desea un flujo de caja sano, el vendedor llegar a su cuota, el planificador de demanda lograr una exactitud elevada de pronóstico, el responsable de reparto llenar al máximo sus camiones, el programador de producción lograr sus objetivos de productividad y control de costo; ¿cadena de suministro resiliente? será el objetivo del responsable de la cadena de suministro.
El rompimiento de cadenas no es siempre una frase positiva, si no preguntemos esto al responsable de la Cadena de Suministro. ¿Cadena de suministro resiliente?, hemos revisado el concepto, sin embargo, es sumamente amplio. Primero tenemos que asegurarnos de contar con un nivel adecuado de madurez de nuestra cadena de suministro, procesos adecuadamente identificados y diseñados, en control y evidencia de gestión, mejora continua de desempeño e información confiable. El tenerlo, nos dará la tranquilidad de pisar sobre seguro y diseña nuestros planes de mitigación de riesgos.
Finalmente, hablemos sobre acciones concretas: i. establece un flujo de comunicación y retroalimentación con tus principales proveedores y clientes, ii. mide la posibilidad de la ropturas en tu cadena de suministro, iii. identifica tus proveedores críticos y evalúa opciones viables que puedes activar en caso sea necesario, iv. define como accionar en casos de eventos disruptivos, vi. asegúrate que tus principales proveedores tengan planes de este tipo desarrollados.
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30-09-2020 / GS1 Perú
