Conocer las condiciones reales de la procedencia de los productos que consumimos o comercializamos es difícil, de la misma forma que es complicado saber qué impacto ha tenido ambiental o socialmente en su recorrido y distribución. Estar seguros que un producto no ha pasado por un proceso que implica esclavismo. O en el caso de alimentos si provienen de un entorno contaminante.
Para tomar decisiones de consumo que estén en línea con nuestra ética y valores es necesario conocer de manera clara y confiable la información sobre la procedencia y distribución de los productos. Además, la falta de transparencia en la cadena de suministro permite que algunos colaboradores cometan fraudes y engaños pasando desapercibidos.
Gracias a la tecnología ahora es posible conocer, trazar, la ruta por la que ha realizado su recorrido un determinado producto, conocer su fecha de creación y más datos adicionales. El blockchain permite manejar grandes bases de datos que recopilan información sobre proveedores, marcas y certificadores con la finalidad de hacer toda la información disponible accesible y transparente.
Esta tecnología al ser una plataforma interconectada, permite que la información de un producto sea guarda en el blockchain y se le asigne un token único que seguirá todo su recorrido recopilando información de manera transparente y completamente confiable.
Existen organizaciones como World Fair Trande y Marine Stewardship Council, que han trabajado para la creación de Estándares y Certificaciones de Sostenibilidad. También está Provenance, que en uno de sus primeros trabajos con la tecnología blockchain los llevó a Indonesia, donde detectaron gracias al sistema blockchain que muchas empresas pesqueras falsificaban certificados de cumplimiento de normas éticas para elevar sus precios.
La finalidad del uso de estas tecnologías es que permitir a los ciudadanos conocer cómo se producen y trasladan sus productos para tomar una decisión que sea acorde a la línea ética que cada uno determina.
25-06-2018 / GS1 Perú