Para algunas personas, la pregunta de si los líderes nacen o se hacen es verdaderamente intelectual: tema para un buen debate en el aula o la cena. Pero para las personas en puestos gerenciales que deben contratar, promover y despedir gente, la pregunta "¿quién tiene las cualidades para dirigir?" definitivamente tiene más importancia.
Acertar en la respuesta puede impulsar la cultura y rendimiento de una organización a nuevos niveles. Equivocarse también tendrá un impacto, pero negativo.
Los hechos son que algunos rasgos de liderazgo son innatos, y tienen un enorme significado y relevancia. Por otro lado, se pueden desarrollar dos rasgos clave de liderazgo con capacitación y experiencia; de hecho, debe ser así.
El liderazgo está compuesto por cinco rasgos esenciales. Estos rasgos, por cierto, no incluyen la integridad, que es un requisito en cualquier posición de liderazgo, o la inteligencia, que también es algo indispensable en el complejo mercado global hoy en día. Tampoco incluyen la madurez emocional, otra necesidad. Estas tres características son básicas y obvias.
Así que vayamos más allá de lo mencionado. Según nuestra experiencia, el primer rasgo esencial del liderazgo es la energía positiva: la capacidad de ir y venir con un vigor saludable y una actitud optimista durante los días buenos y malos.
El segundo es la capacidad de motivar a los demás, liberando su energía positiva para escalar cualquier montaña.
El tercer rasgo es la perspicacia: la capacidad de tomar decisiones difíciles, de decir sí o no, y evitar el ‘tal vez’.
El cuarto rasgo es el talento para ejecutar, simplemente hacer las cosas.
Quinto y último, los líderes tienen pasión. Ellos tienen mucho interés en su trabajo. Sudan la camiseta; ellos creen.
Como se imaginarán, la energía positiva y la capacidad de motivar son cualidades invariables. Básicamente son parte de nuestra personalidad. Del mismo modo, la pasión es algo innato. Algunas personas parecen estar cargadas de intensidad y curiosidad; naturalmente aman a las personas, la vida y el trabajo. Está en ellos. Son ellos.
Entonces, ¿los líderes nacen o se hacen? La respuesta (quizás para sorpresa de pocos) es ambas cosas. Su mejor estrategia entonces es contratar personas con energía, capacidad de motivar y pasión.
09-03-2018 / GS1 Perú